Mi madre me dijo que me dejaría tener un perro, al final como vi que no funcionó cambie de opinión y elegí un jámster, ella me dijo que eso podía ser, entonces escogí un día y dijo que bale , ese día fuimos a comprarlo. Yo iba muy ilusionada cuando nos fuimos a casa jugué mucho con él . Le puse Stuar litel pero todos le decimos Stuar . Siempre que lo llevo a la salita o al comedor nos empezamos a reír por que empieza a dar vueltas en la rueda y es tan chico que parece un pequeño peluche, y se me olvidaba a este si que lo cuido porque es tan mono es de color marrón por arriba y blanco por debajo a mi me encanta
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¡Por fin, Virginia! Me alegro mucho de que hayas sabido adaptarte a la situación, eso me parece inteligente y además es más fácil cuidar a un hámster ¿no?
ResponderEliminarA ver si nos pones una foto.
Un beso
Yo esta vez voy a comentar un comentario sobre el texto. Corrige las faltas de ortografía, tienes vale con b, y es con v. Pon comas en donde las necesita, que por ahí te has saltado una, y pon más puntos. Jjajja, parezco Feli. Respecto al hámster, un amigo también acaba de adquirir uno, y son muy monos. ¡Pon fotos!
ResponderEliminarLástima que mi madre no me deje tener uno...